martes, 4 de agosto de 2009

Mi gran amiga, la bartola.

Me disculpo antes mis seguidores (que según el marcador a la derecha de este post son cero), por haber tardado tanto tantísimo en volver a escribir algo en mi blog personal... y es que llevo un veranito... Ya le gustaría a la Reina Sofía vivir tan bien como vivo yo. Y es que este verano he hecho una nueva mejor amiga... la bartola, a.k.a. tumbona de piscina. Es de extrañar viniendo de una persona que odia el calor y prefiere los lluviosos dias de invierno a las asfixiantes jornadas veraniegas, incluso teniendo el mar a no más de 10 minutos en coche.

Por fin entiendo por qué la mayoría de gente prefiere el verano al invierno. La razón es bien simple: ¡En verano no se hace nada!. Por supuesto que no me gustaba estar sentado en la recepción de un hotel mediano tirando a cutrecillo, sin aire acondicionado y con unos turistas tan exigentes que parecía que se habían equivocado de hotel, y debieran alojarse en uno de 5 estrellas lujo. Ahora entiendo la esencia del verano, unos dias largos y soleados dónde los únicos dilemas que entran en la cabeza es si se estará uno más comodo en el sofá, o tumbado en la cama de su habitación. De si se va a la playa, o a la piscina. Y es que un verano tumbado a la bartola da para mucho... aunque generalmente se consiga poco más que un agradable bronceado en la piel.

Si bien es cierto que en mi caso sí tengo cosas que hacer. Desgraciadamente, mi universidad decidió empezar los cursos en febrero para acabarlos en octubre, lo cual se traduce en tardes y mañanas comiendome libros, y dónde el tiempo parece pasar sólo gracias a la existencia de otro de nuestros amigos de verano, el Señor Aire Acondicionado. Aún así, sigo pensando que vivo mejor que la mismisima Sofía de Grecia. Mañana mismo llega mi amiga Lena. Se avistan días cargados con cosas que estudiar, pero con poco tiempo y ganas para hacer nada, excepto visitar la piscina o la playa para darnos un chapuzón y refrescarnos.

Este sabado 8 de agosto es el Summerland en Alaró, un festival de música electrónica. Si no recuerdo mal, la última vez que asistí llegué a mi casa alrededor de las 8 de la mañana, e iba con mi amiga Lena, quien no creo que vuelva a mezclar diferentes tipos de alcohol al salir de marcha. El 10 de agosto es el cumpleaños de Fernando. Lena, Isabel y yo iremos a Palma para pasar la noche con Fernando y de paso comprar su regalo de cumpleaños. Pero se lo daremos el sábado, dia 15. Nos ha invitado a unos apartamentos en Cala D'or. La noche también promete. Seremos aproximadamente unas 7 u 8 personas.

De momento me queda esperar... y estudiar un poco, a ver si como mínimo, ya que no adelantaré nada del temario, no me quedo atrasado. Otra noticia bastante importante es que ya tenemos los vuelos para ir a Japón, el 15 de noviembre! También tenemos el hotel en Tokio, y a nuestra amiga Kumiko, quien nos guiará por Kyoto y Nara. El avión sale desde Palma de Mallorca hacia Zurich, dónde pasaremos también una noche y aprovecharemos para visitar rápidamente la ciudad. Al día siguiente sale nuestro avión hacia Tokio. Regresaremos hacia Europa el 30, por lo que nuestra estancia en Japón es de 15 días.

Espero "encontrar tiempo" para volver a escribir pronto.

Un saludo a todos, y muchos besos.

Toni.

lunes, 9 de febrero de 2009

En vena

Gracias a la avanzada tecnología sanitaria nos es posible conocer cuales son las sustancias que corren por nuestras venas. Si se realizara un análisis a toda las población mundial (cosa que es practicamente imposible) se encontraría que 1.22 billones de personas contienen dentro de su flujo sanguíneo una droga altamente adictiva llamada nicotina, por muchos creída ser inocua.

Con este post en mi blog personal no pretendo ni mucho menos parecer una madre desesperada intentando convencer a sus descendientes de que hagan lo que ella diga. Simplemente me dispongo a contar mi propia experiencia sobre el consumo del tabaco. Así que ya sabes lo que sigue aquí abajo, en las próximas lineas.

Yo empecé a fumar a una edad NO habitual para comenzar, los 20 años. La mayoría de gente cae en la adicción en una edad más temprana, ya que supuestamente uno sabe "lo que hay" a los 20 años. Yo en mi caso, caí como un tonto, pensando que podría controlar lo que 1.2 billones de personas no pueden. Empecé fumando muy de vez en cuando, quizá una vez cada 2 semanas. La verdad es que para mí suponía un placer encender un cigarro mientras tomaba el sol, tumbado en la playa y sintiendo la brisa oceánica intentando enfriar el sofocante calor que desprendía el sol. "No hay nada de malo en fumar un cigarro cada 2 o 3 semanas", "Eso no será lo que me mate", "Por uno da igual", etc. Esas son las frases que la muy hija puta de mi mente se repetía una y otra vez, engañándome y arrastrándome uno y otro día a encender ese finito vicio de 10 centímetros que se consumía en cuestión de minutos.

El siguiente paso fue, como la mayoría de jóvenes que empiezan, fumar cuando se sale de marcha. Por supuesto, no era sólo 1 el cigarro que encendía, sinó 6 o 7 (facilmente). Al día siguiente, al despertar, después de cepillarme los dientes para eliminar ese desagradable olor a alcohol y tabaco, me venía a la cabeza el hecho de encender un cigarro. Pero no lo hacía. "Sólo al salir de marcha y de vez en cuando". Para mí eso no suponía ningún esfuerzo, puesto que mi adicción a la nicotina era todavía mínima. Lo que si obviaba era que lentamente iba creciendo y apoderándose de mi fuerza de voluntad.

Lo más peligroso de empezar a fumar es que se crean costumbres. Poco a poco encuentras momentos en los que te parece ideal encender un cigarro. Un clásico ejemplo de esto sería al beber un café. Probablemente sea el 80 o 90% de las personas fumadoras que "necesitan" el cigarrillo para beberse un café, porque "se lo pide". Esas costumbres son las que luego se convierten en martirio, al intentar abandonar el dañino hábito de fumar. Lo máximo que yo he llegado a fumar han sido unos 5 o 6 cigarrillos diarios, de baja cantidad en nicotina, o también llamados "ultra light".

Ése forma otro de los engaños más inteligentes jamás creado por las tabacaleras. La marca que yo consumía se llamaba R1, y según indica la cajetilla, el tabaco contiene aproximadamente 10 veces menos de sustancias nocivas que otras marcas de cigarrillos. En concreto contiene 0.1mg de los 3 ingredientes principales (nicotina, alquitrán y monóxido de carbono). Esto no se sinó una ayuda para que tu mente piense que no es tan nocivo, y por consecuencia, no pasa nada si fumo otro más. Al cabo de un par de semanas de fumar unos cuantos cigarrillos al día, esas costumbres que mencioné antes se vuelven firmes e intentar abandonarlas puede llegar a volverse en un auténtico martirio.

Fue hace solo unas 2 o 3 semanas que decidí abandonar este hábito para así ganar salud y dejar de tirar el dinero como un tonto. Los dos o tres primeros días no suponieron prácticamente un problema, lo cual me llevó a pensar que me sería bastante fácil recuperar la salud perdida. Después del tercer día, mis mandibulas empezaron a apretarse y cuando llegaron las 4 o 5 de la tarde el dolor de muelas y encías era insoportable. El malestar que sentía en mi cuerpo jamás lo había experimentado, y eso me convertía en una persona esquinada y antipática, con paciencia cero y sin ganas de aguantar tonterías de nadie. Unos días más tarde viajé a Barcelona a casa de mi amiga Irene. Ese viaje era para hacer un break de la isla, despejarme y volver psicológicamente fresco y fuerte. Como un imbécil volví a caer en la adicción del tabaco y me dejé llevar por una de estas excusas que crea la mente para conseguir su droga, esa droga que yo tanto ansiaba. Esos 4 días fumé más de lo que en mi vida había fumado. El último día, justo antes de volver hacia Mallorca dejé la caja de tabaco empezada encima de la mesa. De nuevo empezaba mi lucha contra esta maldita planta de aspecto inofensivo.

Ya había leído en internet sobre los cigarrillos electrónicos. Unos dispositivos en forma de cigarrillo que desprenden vapor de agua con nicotina, pero sin los otros componentes dañinos y cancerígenos del tabaco, como son el alquitrán o el monóxido desprendido de la combustión del papel, pegamento y tabaco. Adquirí uno en una página web por 50 euracos, con unos cartuchos con diferentes niveles de nicotina, los cuales tienes que ir cambiando a medida que te vas acostumbrando, para así disminuir el nivel de adicción hasta hacerla desparecer. Así que como ya veis no he conseguido superar mi adicción a la nicotina todavía, pero al menos estoy en un lado más seguro, ya que no estoy consumiendo productos cancerígenos. Sí, sí, eso es solo otra frase que ha creado mi mente para seguir consiguiendo nicotina. ¿Acaso crees que no lo sé?

Aún así, juro por mi tozudez que dejaré el hábito de fumar y llegará un momento en el que no sentiré la más mínima adicción a esta peligrosa sustancia!! Espero que este post te haya ayudado a alejarte del tábaco, en caso de que no seas fumador/a. Si eres de los míos, de los que está adictos a la nicotina, espero que al menos consideres el hecho de comprate un cigarrillo electrónico para vencer la adicción, o , como mínimo, que sopeses los pros y los contras de ese dinero malgasto. Créeme, tu sí puedes vivir sin tabaco!